Tuesday, December 28, 2004

Cuando los recuerdos se van

La "noche buena" fue una dificil prueba. Un resumen rápido de antecedentes:

Un familiar cercano es (o fue) escultor, musico, pintor. Con mas de 30 años de artista, le fue diagnosticado envenenamiento por plomo (la pintura, los oleos, etc) y un proceso irreversible comenzo a quitarle el movimiento y la memoria.

Volví a verlo en la noche de navidad, nos invitaron a cenar. Aunque es admirable la energia y la capacidad de este hombre para luchar contra esta condena de muerte, fue muy duro verlo en una silla de ruedas, vagamente consciente de quienes estaban a su lado. Con eventuales flashbacks (recuerdos) cruzando por su inescrutable mente (hace tiempo dejo de hablar) no podemos mas que preguntarnos "que estara pensando ahora?" hasta que algun estimulo lo hace levantar la mirada y sonreir, quiza cuando reconoce a alguien, quiza cuando escucha algo, pero por un momento vuelve a tener ganas de moverse, de luchar. Su esposa, una mujer que ha peleado contra medio mundo, quiza apretandose el corazon, sigue con el, lo cuida, le habla, bromea con el, lo hace sentirse digno, y creo que es ella quien lo mantiene vivo hasta hoy.

Personalmente odiaria tener un destino asi. Si no fuera capaz de moverme, de usar mis manos, si un dia me dijeran "no puedes volver a tocar, o a escribir, o a hablar" preferiria la muerte antes que depender de alguien que me alimente, o que cuide de mi. Siento el dolor de este hombre, un artista, y aunque yo jamas llegue a serlo, solo puedo pensar en lo que significa ver al mundo desde ahi. Creo que no volveré a verlo para la proxima "noche buena", y creo que -aunque suene horrible- él quiere ser liberado de ese destino.

Ah.. está por demás decir que no fue una noche "tan buena", sin embargo aunque suene egoista, me alegré por tener a mis hermanos y a mi padre conmigo, aunque no hayamos cenado como yo quería, y las velas de aroma apenas hayan estado encendidas únicamente durante 20 minutos mientras comíamos algo en casa antes de ir a la cena (seamos honestos... una abundante cena, en estos tiempos? no cabe exigir algo asi, peor aun cuando uno es el invitado)


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